En un mundo donde las compras en línea imperan, la logística urbana debe posicionarse como una de las actividades principales para la industria. Este tipo de logística consiste en englobar todos los movimientos relacionados con el suministro y la distribución de bienes en las ciudades para asegurar las actividades comerciales y desarrollo económico del núcleo urbano. Con el comercio electrónico, los establecimientos comerciales han dejado de monopolizar la distribución urbana, que provee a negocios e individuos y ahora los clientes también adquieren sus productos por internet.
Este modelo debe enfrentar algunos retos, que consisten en poder transformarse para lograr ser más hábiles y sostenibles para la industria. Uno de estos desafíos a superar durante el próximo año y que volverá más eficiente la cadena, es la rapidez con la que se realicen las entregas, pues enfrentando tráfico y congestiones viales inherentes a las ciudades se vuelve una tarea difícil lograr entregas rápidas y en ocasiones esto provoca el descontento del cliente.
Las exigencias de los clientes también van en aumento por la llegada de su mercancía de manera más rápida y en lugares donde al cliente se le facilite acudir por ella, ya sea en una taquilla inteligente, en su lugar de trabajo o en su hogar. La opción de devolución también es un factor importante para el cliente, debido a que si no se siente satisfecho con el producto tiene la oportunidad de devolverlo de manera gratuita, creando más confianza y más satisfecho, aunque se deben reducir los costos unitarios para asumir la gestión de las devoluciones.
Uno de los instrumentos que más ayuda para lograr cumplir con la logística urbana son los centros logísticos que ayudan principalmente a satisfacer de manera exitosa todas las labores logísticas, en este caso su reto es gestionar múltiples unidades de carga, por lo que deben habilitar diferentes zonas de trabajo e instalar sistemas de almacenaje para cajas, bandejas, tarimas, etc.
Lo que podemos esperar para este 2023 para este sector es la búsqueda una mayor demanda en la ocupación de edificios industriales y logísticos para mayor calidad, sobre todo en entornos urbanos, por la proximidad que representa con el consumidor final. También con la mayor demanda se espera que incrementen los precios de las rentas y el sector inmobiliario con ello se beneficiará, debido al encarecimiento de los costes de la energía, mano de obra y tipos de interés que buscarán un ajuste con los precios.